Entrevista: Joel Peralta Fotografía: Alina Vargas-Afanasieva
El Teatro Nacional de la República Dominicana se ha convertido en un epicentro de convergencia artística, donde la música y la danza se entrelazan para dar vida a espectáculos que trascienden los límites de la expresión. En el corazón de esta vibrante escena se encuentran figuras como Carlos Veitía, el actual director del Teatro, y el maestro José Antonio Molina, cuya pasión y dedicación han dejado una huella imborrable en el panorama cultural del país.
Carlos Veitía: un legado de servicio y pasión por el arte


Carlos Veitía, una figura prominente en el mundo de la danza y actual director del Teatro Nacional, encarna el espíritu de servicio y la profunda conexión con las artes escénicas. Su trayectoria, marcada por la profesionalización de la danza clásica y el desarrollo de un lenguaje de identidad coreográfico nacional, refleja un compromiso inquebrantable con el enriquecimiento del panorama artístico dominicano.
Desde su llegada al Teatro Nacional, Veitía ha priorizado el servicio a la clase artística y a la comunidad en general. Su labor se ha centrado en equilibrar la programación, brindar oportunidades a los artistas nacionales e internacionales y producir espectáculos de alta calidad. Además, ha impulsado mejoras en la infraestructura y la gestión del teatro, reconociendo la importancia de preservar el patrimonio físico e intangible de la institución.
Veitía destaca el papel del Teatro Nacional como un espacio que no solo acoge a grandes artistas, sino que también impulsa el crecimiento y la profesionalización de los artistas dominicanos. Su visión trasciende la mera exhibición de talentos; busca fomentar un sentido de identidad y orgullo nacional a través del arte.
José Antonio Molina: un maestro de la música sinfónica


José Antonio Molina, el maestro de la música sinfónica, ha dedicado su vida a elevar el nivel de la música clásica en la República Dominicana. Su pasión por la música nació en un hogar donde la danza y la música eran el pan de cada día, y, desde entonces, ha convertido su don en una fuerza transformadora.
Molina ha enfrentado numerosos retos a lo largo de su carrera, pero uno de los más significativos fue la oportunidad de dirigir a su ídolo, el maestro Luciano Pavarotti. Sin embargo, su mayor logro ha sido la reconstrucción y el fortalecimiento de la Orquesta Sinfónica Nacional, llevándola a un nivel de excelencia comparable al de las grandes orquestas del mundo.
Molina no solo se ha enfocado en la excelencia musical, sino también en la formación de nuevas generaciones de músicos y en la promoción de la música clásica entre los jóvenes. Su visión es democratizar el acceso a la música clásica, derribando el mito de que es un privilegio de unos pocos.
Música en Movimiento un futuro prometedor para la música y la danza
El espectáculo de “Música en Movimiento” llegará a la Sala Carlos Piantini del Teatro Nacional este 31 de mayo, a las 8:30 de la noche, dándonos un testimonio del poder transformador del arte y del compromiso de figuras como Carlos Veitía y José Antonio Molina con su desarrollo y difusión. Su trabajo incansable y su visión inspiradora aseguran un futuro prometedor para la música y la danza en la República Dominicana, fusionando la rica herencia cultural de nuestro país, a través de composiciones sinfónicas con influencias en la diversidad de lo que es nuestra identidad, con una narrativa visual sin igual, donde el arte continúa siendo un vehículo de expresión, identidad y transformación social.

