Verde lima, rosado intenso, azul “bolita” … Es imposible que los Gingerbread Cottages de Martha’s Vineyard pasen desapercibidos. Se han convertido en un signature del pueblo de Oak Bluffs y son tan conocidos como los faros y playas de la isla
¿Cómo salieron de un cuento de hadas y cayeron aquí?
Pues sus orígenes son bien modestos y comienzan inclusive antes de ser construidos.
Cuenta la historia que en 1835 un grupo de Metodistas empezaron a hacer retiros religiosos en un terreno comprado en el pueblo. Los retiros atraían a personas de diferentes localidades que acampaban en tiendas.
Para 1855 había más de 200 tiendas y las personas comenzaron a necesitar algo más permanente para estas “vacaciones religiosas” y así comenzó la construcción de las casitas en 1864.
500 en total fueron vendidas a precios módicos de la época. El residencial recibió el nombre de “Cottage City”.
El invento de la sierra eléctrica llega justo a tiempo para adornar de diseños, que recordaban los intricados encajes de la época, a las casitas en cuestión. Los colores, como si fueran una canasta de huevos de pascua, fueron aplicados por todos los dueños en una competencia silenciosa para lograr la casita más bonita.
Este estilo arquitectónico de cuento de hadas es conocido como “Gótico de Carpintero” y era muy popular en el siglo XIX. Las casitas parecían sacadas del dulce cuento de Hansel & Gretel y por eso fueron renombradas como “gingerbread houses.»
En el 2005 lograron el reconocimiento de National Historic Landmark.
Hoy en dia, 300 casitas permanecen en el complejo, así como un museo en la entrada que exhibe una réplica de las originales de los 1800. Estas casas son residencias privadas, pero pueden ser contempladas y fotografiadas desde las aceras. En algunos lugares no se permiten bicicletas ni perros para garantizar su preservación.
¿Cuándo lucen más bellas? Durante una noche de cada Agosto, las casitas son decoradas e iluminadas con linternas de papel.
La celebración comenzó en1869 convirtiéndose en una tradición que tiene por nombre Grand Illumination Night.
Si te encuentras con ellas de frente cuando visites la isla, estoy segura de que te llenaras de recuerdos de todos esos cuentos de tu infancia.
