Belmond Villa San Michele
fotos: Fuente externa
¡El romance está en el aire! pero se disfruta más en las colinas de Fiesole (Florencia, Italia), donde se visualiza una proeza arquitectónica que embellece de forma subliminal toda la ciudad. Y es que Belmond Villa San Michele le corta la respiración a cualquiera, al dejar hipnotizados a quienes tienen la dicha de verla en todas sus dimensiones.
Su estilo renacentista se entremezcla a la perfección con la magnificencia de la Madre Naturaleza, logrando deleitar, en cada momento, a sus visitantes. Esta mansión toscana se encuentra enclavada en un antiguo monasterio medieval, lo que denota el gran misticismo que impera en sus espacios.
Pero no todo es perfecto, ya que este lugar tiene un grave problema y es que, a la hora de elegir, los turistas no saben qué es lo más grandioso, si el paisaje natural o la villa en sí. Difícil, ¿no?.
El diseño de su fachada estuvo a cargo del célebre arquitecto, escultor y pintor italiano Miguel Ángel.
La sagrada esencia del convento sigue intacta, debido a que en ella se observan detalles de la arquitectura de la época, como las puertas de madera que portan enormes cerraduras de forja y conducen a angostos túneles. En su interior, las paredes están adornadas de un sinfín de retratos de monjes y demás elementos religiosos, pero descuida, que lo profano aquí también tiene su lugar.
Este impresionante hotel consta de 46 habitaciones de lujo y muchas de ellas ostentan jardines y terrazas privadas, lo que permitirá que el huésped se sienta inmerso en la naturaleza todo el tiempo.
Algo que diferencia a este hostal de otros es su estilo de decoración minimalista (una elegancia sin estridencias) destacándose sus accesorios hechos a mano. Cada rincón de este exuberante palacete está destinado a brindar confort a los amantes de la buena vida.
El restaurante La Logia ofrece los sabores autóctonos de la región, entre sus platos insignias están: langostas del mar Tirreno, sazonadas con hinojo silvestre y carne de chianina finamente rebanada.
Para refrescarse con un delicioso coctel, diríjase al bar que está en la piscina, donde gozará de las espectaculares vistas desde la cima de la bella Toscana.
Si quiere disfrutar de los atardeceres más hermosos y sentirse cerquita del firmamento, Belmond Villa San Michele, le espera.