Fotos: Alberto Liránzo
Esther Tavárez ha redefinido el arte de la cata de aguas minerales naturales con una dedicación apasionada y un enfoque meticuloso. Desde su transición desde el mundo legal hasta convertirse en una de las pocas sommeliers de agua reconocidas internacionalmente, Esther ha llevado su amor por este recurso vital a nuevas alturas.
Similar a una cata de vinos, la cata de agua bajo la dirección de Esther implica la selección cuidadosa de tres a seis tipos de aguas minerales naturales. En un ambiente sereno y bien iluminado, cada muestra se evalúa con los sentidos:
Vista: Se aprecia la claridad y ausencia de partículas en el agua.
Olfato: Detecta matices sutiles de minerales, especialmente en aguas con alta mineralización.
Gusto: Un sorbo revela el sabor y la textura, desde lo dulce hasta lo salado, suave o con una sensación más compleja en boca.
Entre cada muestra, se toma un momento para apreciar y diferenciar las características únicas de cada agua. Este enfoque meticuloso no es solo un ejercicio de refinamiento personal; es una oportunidad para educar sobre la diversidad y la calidad del agua disponible. Esther enfatiza la importancia de seleccionar el agua adecuada para cada ocasión y estilo de vida, destacando cómo una elección consciente puede transformar la experiencia diaria de hidratación y bienestar.
Para Esther, la cata de agua va más allá de la degustación. Es comprender que no todas las aguas son iguales; cada una tiene su lugar, dependiendo de la ocasión y el estilo de vida de quien la disfruta. Es un recordatorio de que hidratarse no es solo tomar agua, sino elegir el agua adecuada para potenciar nuestro bienestar diario.
La diferencia entre el agua purificada y el agua mineral natural es crucial. Mientras que la primera se trata para eliminar impurezas y microorganismos mediante procesos como la osmosis inversa y la cloración, la segunda se extrae directamente del manantial sin intervención humana. Esta conserva una mineralización constante y es microbiológicamente segura según los estándares europeos, permitiendo solo ajustes mínimos como la adición o eliminación de dióxido de carbono.
Su trayectoria hacia la cata de agua comenzó hace tres años, motivada por un desafío personal de salud y una profunda conexión con el agua como elemento vital. Con una formación en Derecho y Economía Financiera, Esther encontró en la sommelería de agua una pasión que la llevó a certificarse en la prestigiosa Doemens Academy en Alemania, convirtiéndose así en una pionera en su campo en la República Dominicana y el Caribe.
Desde julio de 2023, Esther ha desempeñado su papel con una combinación única de conocimiento técnico y pasión personal. Su compromiso con la educación y la divulgación ha llevado sus enseñanzas más allá de las fronteras, participando en conferencias internacionales y compartiendo su expertise en redes sociales y medios especializados.
La relación entre el agua y los destilados añejados también es un punto focal en el trabajo de Esther. Ella destaca cómo el perfil mineral del agua utilizada en la producción puede influir en el sabor final de los destilados, subrayando la importancia de la selección adecuada del agua mineral para optimizar las experiencias de degustación.
Esther Tavárez no solo nos invita a descubrir las maravillas del agua a través de sus sentidos, sino que también nos inspira a encontrar significado en cada sorbo y a valorar la pureza y diversidad de este recurso vital en nuestras vidas diarias.
